ENCUESTA Para los empresarios la inflación es la mayor amenaza al “clima de negocios”

Una encuesta revela que para siete de cada diez empresarios la inflación es el principal factor que amenaza el clima de negocios en el país, mientras que para seis de cada diez es la evolución del costo salarial.

El relevamiento corresponde al Sondeo de Expectativas de Líderes Corporativos de mayo elaborado por la consultora BDO Argentina y se conoció ayer.

Los datos del quinto mes revelaron que la preocupación por la inflación de los principales directivos de empresas creció 2,8 puntos desde el mismo mes del año pasado, al pasar del 67,2 a 70 por ciento.

La muestra estuvo integrada por unos 100 empresarios, entre pequeños y grandes, que en conjunto facturan 357,5 mil millones de pesos al año.

El 44 por ciento de los empresarios ve como factor que amenaza el clima de negocios al cambio de regulaciones; el 43 por ciento está preocupado por el aumento del tipo de cambio; y el 40 por ciento teme por el devenir político nacional.
El trabajo indica que los empresarios esperan una leve caída de la actividad económica para este año.

El 41 por ciento prevé que disminuirá entre algo y mucho del PBI, mientras que el 40 por ciento considera que aumentará entre algo y mucho; y el 18 por ciento dice que no variará.

El economista de BDO, Fernando Garabato, indicó que “en términos generales considero que la expectativa para el segundo semestre es positiva, acentuándose hacia fines de año”.

Explicó que la expectativa positiva se debe “básicamente por el rebalanceo de las variables macro que se ajustan de manera sostenida, ejemplo, política del BCRA vinculada al manejo de tasa de interés (continua la baja) y tipo de cambio”.

En opinión de Garabato, “la incertidumbre puede persistir” pero al mismo tiempo evaluó que “resulta claro que la perspectiva es de crecimiento”. Esto se debe a que, según surge de se evaluación del relevamiento, la opinión es que “los aspectos más críticos de ajuste ya fueron realizados”. Una muestra de conformidad general con el rumbo, en interpretación de Garabato, que indicaría que para los encuestados, como diría el ministro Prat-Gay, el “trabajo sucio ya está hecho”.