Salta | | Estado del Tiempo
| Usuarios Acceso a Usuarios
| RSS Suscripción a RSS

El Che sobre Fidel

Cartas, frases y artículos denotan cuán profundo caló el Comandan­te en Jefe en aquel argentino, que con solo un encuentro se sintió identificado con el revolucionario cubano y sus ideas.

26 de noviembre de 2016| Granma |

Sobre el surgimiento de esa a­mistad el Che diría en una ocasión: “Lo conocí en una de esas frías noches de México […] a las pocas horas de la misma noche de la madrugada era yo uno de los futuros expedicionarios […]”.

Y no es casual entonces que en su carta de despedida, vuelva sobre ese recuerdo, pues marcó el inicio de una etapa vital en la lucha por la libertad de Cuba, de América; y también en la profundización y radicalización del pensamiento de ambos hombres.

Los días de preparación de la expedición del Granma, le permitieron al joven médico aquilatar las cualidades morales del líder cubano. Cuando la persecu­ción a los revolucionarios de la Isla los alcanzó en tierras mexicanas y llevó a muchos a la prisión, la actitud de Fidel conmovió a todos.

En los días de la Sierra Maestra. Foto: Archivo

“[…] Hubo quienes estuvieron en prisión 57 días […] con la amenaza perenne de la extradición […] pero en ningún momento perdimos nuestra confianza personal en Fidel Castro. Y es que Fidel tuvo algunos gestos que, casi podríamos decir, com­prometía su actitud revolucionaria en pro de la amistad. Recuerdo que le expuse específicamente mi caso: un extranjero, ilegal en México, con toda una serie de cargos encima. Le dije que no debía de manera alguna, pararse por mí la Revolución, y que podía dejarme; que yo comprendía la situación y trataría de ir a pelear desde donde me lo mandaran y que el único esfuerzo debía hacerse para que me enviaran a un país cercano y no a la Argentina. También recuerdo la respuesta tajante de Fidel: “Yo no te abandono” […] Esas actitudes personales de Fidel con la gente que aprecia son la clave del fanatismo que crea a su alrededor […]”.

Fidel impresionó al Che como “un hombre extraordinario”, de esos que sin importar cuán imposibles son las cosas, las encara y las resuelve. Esa capacidad, su inteligencia y el humanismo que emanan de su persona, fueron las que hicieron que reconociera en él a un líder indiscutible.

“[…] Fidel es un hombre de tan enorme personalidad que en cualquier movimiento donde participe, debe llevar la conducción”, escribió en uno de sus ar­tículos, donde también lo denomina como una “fuerza telúrica” y valora que “(…) El futuro colocará en su lugar exacto los méritos de nuestro primer ministro”.

Porque para el Che, “[…] si no­sotros estamos hoy aquí y la Revolución Cubana está aquí, es sencillamente porque Fidel entró primero en el Moncada, porque bajó primero del Granma, porque estuvo primero en la Sierra, porque fue a Playa Girón en un tanque, porque cuando había una inundación fue allá y hubo hasta pelea porque no lo dejaban entrar […], porque tiene como nadie en Cuba, la cualidad de tener todas las autoridades morales posibles para pedir cualquier sacrificio en nombre de la Revolución”.

Antes de partir de Cuba en 1965. Foto: Archivo

En el Granma, los combates de la Sierra y la invasión; en los amenazantes días de Girón y la Crisis de Octubre; en la necesaria lucha por la sobrevivencia económica, por sacar adelante el país, el Che estuvo al lado de los cubanos, su sangre y su sudor construyeron también la Revolución y edificaron un nuevo país que hizo suyo y al cual amó entrañablemente.

También en esa cercanía, en ese amor, estuvo la mano de Fidel, el primero que lo hizo sentir cuán justa era la causa de la gente noble de esta tierra. De ello testimonia la carta de despedida que le dejara al Comandante en Jefe antes de ofrecer en otras partes del mundo, el concurso de sus modestos esfuerzos.

“Que si me llega la hora definitiva bajo otros cielos, mi último pensamiento será para este pueblo y especialmente para ti. Que te doy las gracias por tus enseñanzas y tu ejemplo al que trataré de ser fiel hasta las últimas consecuencias de mis actos”.

Publicidad
Publicite aqui
Publicite Aqui

Datos de Contacto:
Cel: 3874152946
E-mail: redaccion@copenoa.com.ar

Libros: Orden, Represión y Muerte

Orden, Represión y muerte

Diario de la criminalización de la protesta social en Salta - Marco Diaz Muñoz

Portada | General | Politica | Policial | D.D.H.H. | Cultura | País | América Latina | Mundo | Pueblos Originarios

Copyright 2001 - 2010 - Todos los derechos Reservados - copenoa.com.ar