Encuentran relación entre consumo de alcohol y arritmia cardíaca, aunque podría disminuir infartos

La investigación realizada en Texas (EEUU) mostró un vínculo entre el consumo de alcohol y la aparición de fibrilación auricular, aunque las zonas con consumo de alcohol tuvieron menos infartos.

Un estudio científico publicado por investigadores norteamericanos encontró relación entre el consumo de alcohol y la aparición de una alteración del ritmo cardíaco llamada fibrilación auricular. Pero también hallaron que el consumo de alcohol se asoció a menor cantidad de infartos. El estudio es el más reciente episodio de la extensa controversia sobre los posibles riesgos y beneficios del consumo de alcohol para la salud cardíaca.

El trabajo de los investigadores norteamericanos comparó los registros hospitalarios entre personas de localidades dónde se encuentra prohibida la venta de alcohol y personas de localidades donde está permitida, en el estado de Texas. Los investigadores aprovecharon que algunas regiones de dicho estado mantienen aún legislación propia de la época de la prohibición, un período de la historia norteamericana en que la venta de bebidas alcohólicas se encontraba terminantemente prohibida.

La investigación, publicada en el prestigioso British Medical Journal, encontró que las personas que residen en regiones dónde la venta de alcohol es legal presentaban mayores tasas de alcoholismo, más enfermedades hepáticas y neurológicas debidas a alcohol y mayor prevalencia de fibrilación auricular, comparados con aquellos que viven en lugares dónde la venta de alcohol se encuentra prohibida. Pero, por otro lado, los que pertenecían a las regiones “prohibicionistas” tenían mayor frecuencia de infartos cardíacos.

Según el doctor Gregory Marcus, director de investigación clínica en la Universidad de California, San Francisco, “Es muy difícil aún poder hacer recomendaciones sobre el consumo de alcohol”, más allá de evitar el consumo crónico de grandes cantidades. “No están claros aún los beneficios de una ingesta moderada de alcohol, y faltan muchos estudios antes de poder hacer recomendaciones”.

Según el doctor Marcus, la relación entre la fibrilación auricular y el consumo de alcohol “es el hallazgo más consistente y robusto de esta investigación”. Pero los resultados pueden ser engañosos: el estudio no es suficiente para establecer niveles seguros de consumo de alcohol, ni permite reconocer a partir de qué nivel de consumo aumentan los riesgos para el corazón.