Guzmán ratificó que el pago a los acreedores y al FMI es la prioridad del Gobierno

Anunció que enviarán al Congreso un proyecto para garantizar la “sostenibilidad” de la deuda pública.

En una conferencia de prensa realizada este martes por la mañana, el ministro de Economía Martín Guzmán ratificó que la prioridad de su gestión es garantizar los pagos de la deuda pública.

“La situación del país es crítica, enfrenta una profunda crisis de deuda por lo que se ha hecho, que fue un desastre. En dos años el país rifó el acceso al mercado de créditos internacionales, aumentó brutalmente el endeudamiento y no generó un aumento de su capacidad productiva para hacer frente a los compromisos que habían tomado”, afirmó el funcionario.

Sin embargo, ratificó que el gobierno nacional tiene como prioridad sostener los pagos de la deuda pública. En ese marco, informó que enviarán un proyecto de ley al Congreso Nacional, apuntado a ratificar la “sostenibilidad” de la deuda.

Hay que recordar que este era el mismo fundamento de la Ley de emergencia económica votada en diciembre pasado. La misma estableció la suspensión de la movilidad jubilatoria, en aras de reducir el gasto fiscal. La medida apuntaba -como ocurre ahora con este proyecto- a mostrar esa "voluntad de pago" ante los grandes acreedores internacionales.

En la conferencia, Guzmán afirmó que le pedirán negociar “de buena fe” a los bonistas internacionales. Si bien aclaró que aun no existe una propuesta concreta y que los detalles de la misma se conocerán "en el momento que corresponda".

Sobre el proyecto en cuestión, el ministro afirmó que “la ley nos dará condiciones para poder estructurar, ejecutar y resolver de manera ordenada y prolija la crisis de la deuda”.

En relación a la situación de la provincia de Buenos Aires, el ministro pidió a los acreedores internacionales que acepten la propuesta planteada por el gobierno de Kicillof. Como se recordará, el Ejecutivo provincial pidió la postergación de la fecha de pago de bonos que vencen la semana próxima. El monto de esa deuda supera los USD 250 millones.

Al inicio de la campaña electoral el peronismo denunció el carácter fraudulento de gran parte de la deuda pública tomada durante la gestión de Macri. Sin embargo, una vez que llegó al poder estableció la continuidad de los pagos, dándole legitimidad a la misma.