Comisaría 20, Orán: Los chicos fueron brutalmente golpeados. El gobierno encubre.

Juicio y castigo a los responsables materiales y políticos de la “Masacre de Navidad”. La visita de algunos miembros de la Comisión de derechos Humanos de la Cámara de Diputados a Orán permitió esclarecer algunos puntos de la denominada “masacre de navidad” a partir del relato de los familiares.

Los testimonios han dejado en claro que intervino la infantería y que golpeó brutalmente a los jóvenes de los cuales seis murieron. Los familiares revelaron que los golpes eran evidentes en los cuerpos. Hundimientos de cráneo, falte de piezas dentales, hematomas etc.

Una madre logró recuperar la ropa que tenia puesta su hijo al momento de ocurridos los hechos y esta es la muestra clara de que no murieron por quemaduras, o por lo menos no fue esa la única causa. El certificado de defunción dice que presentaba el 80% del cuerpo quemado y sin embargo la ropa no tiene el menor rastro de quemaduras.

Por otro lado los familiares y periodistas revelaron que los sobrevivientes salieron esposados y caminando de la comisaría y fueron trasladados en camioneta al hospital. Un hecho aberrante.

El diputado Pablo López, que estuvo en Orán el jueves pasado señaló que; “la intervención de la infantería esta clara y no hay dudas de que golpearon brutalmente a los chicos. Orientar la investigación solo hacia la responsabilidad del policía que ingreso bebidas alcohólicas es un acto de encubrimiento”.

Uno de los chicos fallecidos, detenido por supuesto homicidio, había denunciado torturas de todo tipo para que se haga cargo del homicidio. La denuncia la hizo en su declaración ante el mismo juzgado que entiende en la causa de la Comisaría 20. Esto ya anunciaba lo que iba a pasar y la jueza no hizo nada. Esta jueza, de apellido Vera tiene las tres causas de muerte de jóvenes en comisarías de Orán sin que ninguna se esclarezca hasta la fecha. Fue la misma que ordenó la detención de los dirigentes del PO, Rubén Tolay y Josefa Cardozo, previa a la brutal represión de los asentamientos en los primeros meses del año pasado.

La hipocresía de Urtubey

El gobernador dijo en el acto de incorporación de nuevos policías que no quería policías como los de la masacre de Orán o los secuestradores de Anta. Sin embargo amenaza de expulsar a una gran cantidad de huelguistas, actitud contrapuesta a la que tuvo en relación a los dos casos mencionados que muestran la enorme descomposición del aparato represivo. Es claro que el gobierno le da impunidad para luego usarlos para reprimir. Por eso todos los funcionarios que fueron a Orán montaron un gran operativo de encubrimiento con la teoría del motín.

Pablo López, al regreso de Orán reclamó “el inmediato juicio a castigo a los responsables materiales y políticos de la masacre de la comisaría 20”, y concluyo; “es necesario desmantelar este aparato represivo y descompuesto”.