“DÉCADA GANADA” Cristina, Lázaro y Cristobal imputados por “coimear” en Los Sauces

En la causa en la que ya están imputados CFK y Máximo por “enriquecimiento ilícito”, el fiscal Rívolo dice que la expresidenta habría recibido plata a cambio de dar generosa obra pública.

Según indicaron fuentes judiciales a la prensa, ayer el fiscal federal Carlos Rívolo imputó por supuesto “cohecho” a la expresidenta Cristina Fernández y a los empresarios kirchneristas Lázaro Báez y Cristóbal López. Es en la causa en la que se investiga a la firma Los Sauces S.A., perteneciente a la familia Kirchner.

Rívolo le pidió a Bonadio, además, que investigue si Los Sauces obtuvo dividendos después de diciembre último, cuando Máximo Kirchner pasó a ser un funcionario público como diputado de la Nación por el Frente para la Victoria. Si la respuesta es sí, entonces imputaría también el hijo de Néstor y Cristina.

El delito de cohecho (“coima” en criollo) prevé penas de entre uno y seis años e inhabilitación especial perpetua para “el funcionario público que por sí o por persona interpuesta, recibiere dinero o cualquier otra dádiva o aceptare una promesa directa o indirecta, para hacer, retardar o dejar de hacer algo relativo a sus funciones”.

La investigación judicial es sobre los negocios inmobiliarios de la familia Kirchner donde los principales inquilinos fueron Báez (hoy procesado y detenido por lavado de dinero) y López (que a su vez está imputado en otra causa por maniobras de evasión impositiva millonaria).

¿Cómo serían las coimas?

Cristina y Máximo son dueños de Los Sauces, sociedad que administra inmuebles en diferentes lugares del país. Lázaro y Cristóbal les habrían pagado fortunas por alquileres de algunos de esos inmuebles. A cambio de esas fortunas, la hipótesis indica que Cristina y Máximo otorgarían importante cantidad de obra pública a las empresas de Báez y López. Así, los empresarios enriquecidos destinarían nuevamente dinero a los alquileres sobrevaluados de Los Sauces y la rueda avanzaba.

La composición accionaria de Los Sauces S.A. está integrada con 45 % de Cristina Fernández, 32,5 % de Máximo Kirchner y 22,5 % por ciento de Florencia Kirchner.

Las empresas “inquilinas” son nada menos que Inversora M&S y Alcalis de la Patagonia, de Cristóbal López; y Valle Mitre, Loscalzo y del Curto y Kank & Costilla, de Lázaro Báez.

La causa la motorizaron las denuncias de la diputada del GEN y actual aliada de Mauricio Macri, Margarita Stolbizer. En una última ampliación por escrito de la denuncia original sobre Los Sauces, Stolbizer dijo que “en Hotesur la devolución de los favores se hacía a través del alquiler de habitaciones. Con Los Sauces, la devolución de favores se hacía mediante el alquiler de inmuebles a las empresas de Lázaro Báez y Cristóbal López”.

Se habla de departamentos y oficinas en Puerto Madero, en la Ciudad de Buenos Aires, y lotes en El Calafate, El Chaltén y Río Gallegos en Santa Cruz.

Stolbizer afirma que Los Sauces era titular de ocho inmuebles y “no tuvo demasiados movimientos hasta 2008, año en el que comienza a realizar sus inversiones inmobiliarias” y todos los bienes eran alquilados a “empresas de Lázaro Báez y firmas de Cristóbal López”.

La maniobra sería la adjudicación de obra pública a esas empresas mientras “en forma paralela Cristina Fernández de Kirchner recibía dinero mediante un acuerdo que tenía la apariencia de un vínculo comercial pero encubría una promesa, en su condición de funcionario público, para otorgar más obra pública y omitir todo tipo de controles por parte del Estado”.

La diputada utilizó la fórmula judicial de Amicus Curiae (amiga del tribunal) para presentar sus escritos. Tan “amicus” parece Stolbizerr que el mismo día en que presentó su ampliación de denuncia, el juez Bonadio ordenó allanar consorcios que administran departamentos propiedad de Los Sauces en Puerto Madero y Constitución (Ciudad de Buenos Aires) en busca de constancias de pago y otra documentación.

Bonadio y las “causas conexas”

El martes el abogado defensor de la expresidenta, Carlos Beraldi, presentó en los tribunales federales de Comodoro Py un pedido para que “por conexidad” la causa “Los Sauces” pasara a manos del juez Julián Ercolini, quien lleva adelante la investigación conocida como Hotesur.

El juez Bonadio recibió el pedido de la defensa y corrió vista a las partes para que den su opinión antes de resolver sobre este planteo del abogado Beraldi.

Mientras Cristina y sus amigos esperan a ver si Bonadio entrega esa causa, hubo novedades en otro proceso que el mismo juez lleva adelante. Es el que investiga supuestas maniobras fraudulentas alrededor del “dólar futuro” ocurridas en el tramo final de la presidencia de CFK.

Ayer, aunque suene raro, el macrismo dio curso a un pedido de Cristina. El representante del Poder Ejecutivo en el Consejo de la Magistratura, Juan Mahiques, dio impulso en ese organismo a la denuncia por mal desempeño contra Bonadio que había presentado la expresidenta por la causa del dólar futuro.

Mahiques, que es el encargado (por sorteo) de instruir esa denuncia, solicitó informes a la Cámara Federal sobre las acusaciones de Cristina contra el juez que la imputó e indagó por la operatoria de venta de dólar a futuro.

“El juez Bonadio se encuentra en la causal de mal desempeño habida cuenta del ejercicio abusivo y arbitrario del poder jurisdiccional que le fue conferido, ello en el marco de una causa en la cual se persigue una exclusiva finalidad política”, dice la denuncia de la expresidenta.

En la causa de dólar a futuro Bonadio debe resolver la situación procesal de la expresidenta, de Alejandro Vanoli (ex presidente del BCRA), del ex ministro de Economía Axel Kicillof y de directivos y funcionarios del Banco Central y de la Comisión Nacional de Valores. Se trata de la causa por la que Cristina se presentó a declarar en los Tribunales de Comodoro Py el 13 de abril, acompañada por una masiva movilización.

Fue cuando realizó su primer discurso público tras dejar el gobierno, en el que lanzó su llamado a conformar un enigmático “Frente Ciudadano”.

Los laberínticos ribetes de las causas judiciales que involucran a Cristina y sus viejos amigos son desde hace meses el bocado predilecto de Clarín y el resto de los medios macristas. Una excelente excusa, además, para no hablar de los Panama Papers y los chanchuyos de Macri y sus viejos amigos.

Pero es, sobre todo, la confirmación de que, sean del color que sean, quienes gobiernan este Estado capitalista están sumergidos en la corrupción casi como una condición indispensable para haber llegado a donde llegaron. Es el capitalismo...