Denuncian que por los despidos en el sector aeroespacial «quedó muerto» el desarrollo del lanzador satelital argentino «Tronador II»

El proyecto estaba a cargo de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales y de Veng, hoy foco de la motosierra de Nación. «Es un proyecto muerto», denuncian desde ATE.

Días atrás, Vehículo Espacial Nueva Generación (VENG), la empresa a cargo del desarrollo del cohete lanzador de satélites Tronador II, despidió a trabajadores en el marco de un fuerte desfinanciamiento al igual que todo el sistema científico nacional. Desde ATE denunciaron que este proyecto clave para el país «esta muerto».

En diálogo con Agencia TSS, Emiliano Baum, coordinador del Área de Soporte de Sistemas del Segmento de Estaciones Terrenas de la CONAE y delegado de ATE, denunció una serie de despidos arbitrarios y apuntó contra el Gobierno por la falta de una política científica clara.

“No hay un criterio claro en la nómina de despedidos. Uno de ellos tenía pasajes comprados para viajar a Puerto Madryn con personal de CONICET y una delegación francesa, pero el lunes no pudo ingresar: el molinete no giró y le dijeron que estaba despedido. Hay mucha improvisación, y en esta tanda parece que hubo amiguismo, algo que ya veníamos denunciando”, expresó.

Parálisis total del Tronador II
En ese contexto, Baum fue contundente al afirmar que el proyecto Tronador II está paralizado: “Desde 2016 para acá es un proyecto muerto, más allá de algún intento de reactivación durante el Gobierno de Unión por la Patria. Hacer una prueba de motor no es un proyecto de acceso al espacio, es una partecita. Están haciendo otra cosa, siendo generosos”.

Un Estado que se retira
El delegado explicó que, en los países con desarrollo aeroespacial, el Estado lidera el proyecto y desarrolla la tecnología, mientras que las empresas participan como proveedoras de partes.

“No conozco ningún país que se dedique a comprar partes de motores a otros lugares”, sostuvo, y agregó que cuando consultaron a las autoridades actuales si era posible tener un proyecto de acceso al espacio sin la participación de CONAE y VENG, les respondieron que no, pero que “los que están arriba son felices cuando cierran el día echando gente”.

Despidos en VENG y CONAE
Respecto a los despidos recientes, detalló: “El viernes y el lunes se dieron las bajas porque se terminaron de acomodar las internas. Roberto Yasielksi quedó como presidente de VENG, Laureano Quiroga como gerente general, Alberto Haure en Recursos Humanos y Axel Taboada como director. Son parte de la casta política que ocupa los lugares que La Libertad Avanza no tiene con quién llenar. Así cayeron los primeros 25 despidos, 20 de ellos en Córdoba, y el lunes hubo más”.

También se refirió a la situación financiera de la empresa: “Los números de VENG no están claros. Se genera algo de plata con la venta de imágenes satelitales, lo cual alcanza para sostener algunos equipos. Pero la empresa fue pensada para financiarse con contratos con CONAE, especialmente cuando el Tronador estaba activo”.

Baum subrayó que el proyecto Tronador retomaba la experiencia del Cóndor y de desarrollos espaciales de los años ’60, pero hoy no está al nivel de aquellas épocas. “Va a ser difícil alcanzar algo si cada ocho años se cancelan los proyectos. Hace falta un acuerdo transversal entre las fuerzas políticas con una visión estratégica que este Gobierno claramente no tiene”, concluyó.

Y cerró con una definición tajante: “La destrucción del sistema científico no puede normalizarse. La ciencia y la tecnología son la mejor herramienta para desarrollarnos: generan los mejores trabajos, los de mayor calidad y multiplicadores de oportunidades” (Por Eduardo Porto @periferiacts)