Una vez más, la frontera entre Aguas Blancas (Argentina) y Bermejo (Bolivia) se convierte en escenario de una práctica ilegal que genera profundo repudio: el contrabando de animales.
Esta semana, las redes sociales se llenaron de denuncias de usuarios del norte provincial sobre la venta clandestina de perros de raza, especialmente Siberianos, que son transportados en mochilas para ingresar al país sin ningún tipo de control sanitario ni documentación. “Una cosa es cruzar a comprar una heladera, y otra muy distinta es ir a Bolivia y traer un perrito que fue transportado como si fuera un objeto, escondido en una mochila”, cuestionó una mujer en su publicación, visiblemente indignada. Según relató, los cachorros son ofrecidos a precios muy bajos, lo cual incentiva la compra impulsiva sin considerar las condiciones de origen: “Están todos sucios, posiblemente infestados de parásitos, y ni hablar de las enfermedades”.
Al respecto, se expidieron veterinarios y proteccionistas de la zona que insistieron en desalentar la compra de estos animales, alertando sobre un combo de problemáticas detrás de esta práctica: crías nacidas en criaderos clandestinos donde las hembras son forzadas a parir continuamente, carnets de vacunación falsificados y presencia de enfermedades como moquillo y parvovirus, incluso cepas que no circulan en la región y pueden generar brotes peligrosos. A esto se suma el riesgo real de rabia, que sigue presente en Bolivia. “Un cachorro puede llegar incubando el virus sin mostrar síntomas”, advierten. Desde los sectores veterinarios y proteccionistas instan a la comunidad a no caer en la trampa de los precios bajos: “Por ahorrar unos pesos, muchos terminan gastando mucho más en veterinarios, arriesgando la salud de sus familias y de otras mascotas”, advierten. El reclamo también apunta a las autoridades fronterizas: “No puede ser que a los animales los pasen como si nada. No hay ningún tipo de revisión, ni papeles. Nada”, reclamaron.
Tensión entre vecinos y bagayeros
El aumento de bagayeros en el norte de Salta está generando un fuerte malestar en los barrios de Orán. En especial, los vecinos de la calle San Luis, frente a la ruta en el Barrio Nuevo Azucarero, denunciaron públicamente que los trabajadores informales de frontera ocupan las veredas de forma permanente, empaquetan mercadería, generan ruidos molestos y dejan basura, alterando la vida cotidiana de las familias del lugar. Una vecina expresó su indignación a través de un post en redes sociales, donde relató que desde hace aproximadamente dos meses convive con esta problemática. “Vienen, empaquetan frente a mi casa, dejan basura, orinan en mi portón y hasta discuten cuando se les pide que se retiren”, detalló.
La situación escaló recientemente cuando, harta de limpiar constantemente lo que ensucian, la mujer comenzó a cobrar $5.000 a quienes quisieran permanecer frente a su vivienda. (n.d.)
Carlos Castagnani: "Vamos a ir con nuestro reclamo por las retenciones"
Petroquímica Río Tercero anunció una tanda de despidos masivos.
El rectorado de la Universidad Nacional de Salta cierra la orquesta típica
El contrabando de mascotas, una modalidad ilegal que crece en la frontera
Industria en crisis: el costo de la producción se disparó un 25% en dólares
Villarruel afirma que si el oficialismo quiere recortar gastos lo haga “en viajes y en la SIDE”
Diario de la criminalización de la protesta social en Salta - Marco Diaz Muñoz
Portada | General | Politica | Policial | D.D.H.H. | Cultura | País | América Latina | Mundo | Pueblos Originarios
Copyright 2001 - 2010 - Todos los derechos Reservados - copenoa.com.ar