Lamentablemente hemos acertado cuando el año pasado, al realizarse la audiencia pública convocada por la Corte Suprema en el caso “Orellano”, afirmábamos que: “Estamos ante el peligro de una re edición anacrónica y arbitraria de aquellas restricciones al derecho de huelga de los años 60. Un resurgir del arbitrario criterio aplicado por la Corte Suprema del período 1958/1966, la misma que dictó el antiobrero Fallo Kot.” .
Dijimos esto, porque el propio temario de la audiencia pública: (…)